Cuando hablamos de «escuchar al cuerpo», no se trata solo de notar un dolor aquí o una molestia allá. En realidad, implica entender que el cuerpo tiene su propio sistema de comunicación, que nos habla a través de sensaciones físicas y emocionales.
Pero, ¿cómo funciona esto? ¿Cómo es que el cuerpo y la mente están tan interconectados?
Desde la neurociencia, sabemos que nuestro cerebro y cuerpo están en constante comunicación a través de la llamada “conexión mente-cuerpo”.
Esta conexión se da principalmente a través del sistema nervioso autónomo y el eje cerebro-intestino. Ambos sistemas funcionan como una vía rápida de señales y emociones entre el cerebro y distintos órganos del cuerpo.
Por ejemplo, cuando sentimos estrés, el cerebro envía señales al cuerpo a través del sistema nervioso, desencadenando una respuesta fisiológica: el corazón late más rápido, los músculos se tensan, la respiración se vuelve superficial. Esta reacción es la forma que tiene nuestro cuerpo de decir: «Algo está pasando y necesitamos atenderlo». Pero si no le prestamos atención, estas señales se acumulan y, eventualmente, pueden aparecer como síntomas más fuertes, como dolores crónicos, problemas digestivos o un cansancio profundo.
Otra parte importante de escuchar al cuerpo tiene que ver con el papel de la amígdala y el sistema límbico en el cerebro. Estos son centros que procesan emociones y respuestas automáticas de supervivencia. Cuando experimentamos una emoción intensa, la amígdala la detecta y reacciona enviando una alerta al cuerpo.
Pero si aprendemos a reconocer y a trabajar con esas emociones, podemos responder a nuestras necesidades antes de que se conviertan en un malestar físico.
Esto es «escuchar al cuerpo»: es atender esas señales para evitar que lleguen a un punto crítico.
También entra en juego el eje cerebro-intestino. Este eje comunica nuestros estados emocionales con el sistema digestivo. ¿Te ha pasado que un problema te provoca dolor de estómago? Eso ocurre porque, al percibir ansiedad o miedo, el cerebro manda señales al intestino, impactando la forma en que funciona. Los expertos han llamado a este sistema «el segundo cerebro», porque tiene su propia red de neuronas que responden a nuestras emociones. Así que, escuchar al cuerpo incluye poner atención a estas sensaciones y emociones viscerales.
¿Por qué escuchar al cuerpo puede transformar tu bienestar?
Cuando aprendemos a escuchar al cuerpo, no solo reducimos síntomas físicos; también fortalecemos nuestra inteligencia emocional. Nos volvemos más conscientes de nuestras necesidades y aprendemos a hacer pausas, a cuidarnos de manera integral. Es un camino hacia la calma y la autocompasión que permite conectar con lo que realmente necesitamos.
Escuchar al cuerpo es como aprender un nuevo lenguaje. Al principio puede parecer extraño o confuso, pero cada vez que te detienes y reconoces lo que sientes, construyes un puente hacia una relación más saludable contigo misma.
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Si sientes que es hora de aprender a escuchar a tu cuerpo y quieres entender de una vez por todas esas señales que te envía, te invitamos a formar parte de nuestro Workshop. Será un espacio para descubrir cómo tu cuerpo y tus emociones pueden guiarte hacia un bienestar auténtico y duradero.
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Imagina tener un espacio solo para ti, donde puedas detenerte y prestar atención a esas sensaciones que normalmente ignoras.
El 27, 28 y 29 de noviembre será la próxima edición actualizada del Workshop online
«Escucho mi cuerpo: comunicándome con mi síntoma»
Durante 3 días tendrás una oportunidad única para profundizar en esta conexión contigo misma, en un ambiente seguro y de apoyo, rodeada de mujeres que, como tú, también buscan respuestas.
Durante el workshop, trabajaremos juntas en descubrir cómo tus emociones y experiencias se reflejan en el cuerpo. Explorarás las memorias que guardas en cada célula y aprenderás a identificar las señales que tu cuerpo usa para comunicarse contigo. Este espacio te permitirá entender qué necesitas realmente para lograr un equilibrio que abarque tanto tu bienestar físico como tu paz emocional.
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¿Estás lista para escuchar lo que tu cuerpo tiene que decirte?
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¡Tu cuerpo ya está hablando, y ahora es el momento de empezar a escucharlo!
Es el momento de darle a tu cuerpo y a ti misma la atención y el amor que merecen.
Si te sumas, te guiaré paso a paso para comunicarte con tu síntoma, desde el autodescubrimiento y autobservación. Para mi es ESENCIAL hacerlo ahora, antes de que termine el año, para empezar el nuevo en conexión, coherencia y alineada con EL CUERPO, LA MENTE Y LAS EMOCIONES.
¡Nos vemos pronto!
Con cariño 🧡
Helena